Los niños necesitan ser felices, no ser los mejores

 

Hoy en día, los adultos vivimos más preocupados por el futuro de los niños que por el propio presente que viven. Por ello, programamos su día a día enfocado a su educación y aprendizaje de cara a un buen futuro laboral. Nos olvidamos de que los niños tienen que ser niños, tienen que reír y jugar, tienen que saltar y cantar, tienen que mancharse de barro, en definitiva, tienen que disfrutar sin que esa actividad esté enfocada en un objetivo académico. También deben de jugar y disfrutar sólo como algo lúdico.

Por ello, en esta publicación, se muestran algunos de los inconvenientes de empujar a los niños hacia el éxito, los aspectos importantes qué deben saber realmente los niños y lo que no deben de olvidar los padres.

 

¡ Vamos a aprender jugando !

 

El juego como herramienta de aprendizaje.

Para los niños el juego es una forma de ocio que les ayuda a divertirse y relajarse, pero lo que ellos desconocen es que el juego también es una herramienta muy útil para aprender, y sobretodo para hacerlo de una forma amena a través de la experiencia.

Todo juego tiene que tener una intencionalidad ya que  nos ayuda a conseguir un cambio y lo más importante del juego es el proceso, no el fin.

Para poder plantear un juego didáctico, antes debemos de pensar en: qué se quiere trabajar, cúal es el objetivo que queremos cumplir, cómo se llevará a cabo el proceso y de de qué recursos disponemos.

¿Qué debemos de conocer para poder llevarlo a cabo?. Debemos de:

  • Dominar los contenidos que queremos trabajar.
  • Despertar el interés de los niños.
  • Adaptar el juego a la edad con la que se va a trabajar.
  • Aprender a dirigir el juego.
  • Establecer las reglas del juego.
  • Practicar el juego antes de llevarlo a cabo con los niños.
  • Preparar todo antes de que comience el juego.
  • Preparar otra actividad por si el grupo se cansa.
  • Prevenir posibles dificultades que se puedan encontrar.

¿Qué obtenemos a través del juego?

  • Fomentar valores y conocimientos.
  • Aprender a dirigir.
  • Trabajar en equipo.
  • Fomentar la competición sana.
  • Generar expresividad y confianza en sí mismos.